3 de mayo de 2010

Por ti, sólo por ti

Mujer, por ti olvidan sus nombres los meses del año
La mar encuentra su rostro en los soles del trópico
El áureo sueño lunar se encharca en la espesura
     de tus bosques nocturnos.

Las sombras se agotan al acercase tu horizonte
La aurora busca su horneado polen en tu bahía
Las soñolientas barcas se adentran en tus olas
     de talámica blancura
Y el perfume de las flores en el infinito
    sentido de tu cuerpo.

Por ti el claro dolor de los mares se anega en la espuma
turbia por tu arenal adolescente
Mis ojos crecen en tus ojos
Crecen hasta romper las crisálidas
Hasta caer a tierra enloquecidos por tu aroma
Y mojar sus tiernas raíces en el mundo

Mujer, el silencio calla sus mentiras
Los patios de apasionadas jacarandas se deshojan
Dime, ¿por qué has tardado tanto?
En ti las profecías cumplen su destino
Las montañas hurtan lejanía
Los naranjos reverdecen catedrales
El claro de los pozos se agita de alegría
Mujer de intensa carne
Todo cambia por ti, solo por ti
Flor de hermosa mácula
en el solitario jardín de los días.

1 comentario:

LSz. dijo...

Un poema entero, un placer encontrarlo.